San Juan de los Morros, 05 de Noviembre de 2020.- En medio de una ola de aplausos, el tocar de la banda marcial de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y el descargue de fusil, desde las instalaciones de la Iglesia Juan Bautista, ubicada en la ciudad de San Juan de los Morros, capital del estado Guárico, el Gobierno Bolivariano junto a la FANB, rindieron un homenaje post mortem al G/B Jesús López por su contribución en los ideales de la patria en el accionar militar.

López, en vida destacaba como segundo comandante de la Zona Operativa de Defensa Integral 35 (ZODI-Guárico) y jefe del Estado Mayor de la ZODI.

Dicho homenaje contó la presencia G/D Carlos Serrano Duque, comandante de la ZODI Guárico, el G/B Luiger Medina Ugas, comandante del Comando de Zona de la Guardia Nacional Bolivariana 34 (CZGNB-34), el G/B Henry David Rodríguez, comandante de la 43 Brigada de Artillería de Campaña Gran Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre, y demás subalternos, oficiales superiores, tropas alistadas, hombres y mujeres

En este contexto, el monseñor Raúl Ascanio, párroco de la Arquidiócesis de Calabozo, durante la ejecución de la misa expresó “Uno de los nuestros deja un espacio al dar media vuelta en marcha para buscar el camino de Dios. Un centinela de la patria entregado a sus ideales de la seguridad, del servicio a la patria, quien deja este vacío”.

Por ende, elevó sus palabras de condolencia a familiares, esposa, hijos, amigos y allegados, FANB, Guardia Nacional Bolivariana, agregando “Encomendamos por el camino de la luz a este hombre viviente y creyente de Dios. Alma que pasa al descanso en paz y la eternidad”.

En este sentido, el comandante de la ZODI-Guárico G/D Serrano Duque, expresó que esto representa un momento duro que afrontan como hombres de arma, quienes hoy además se encuentran en una lucha con un fuerte adversario como lo es la pandemia de la covid-19.

Ahora, G/B Jesús López descansa amortajado con el uniforme de la Patria. Por ello, en memoria de su abnegación y de su coraje vivirá eternamente en cada uno de los corazones de quienes lo conocieron. /Angelo Navarro